Las casas en astrología: La casa 1 o el carro del camino de la vida

En las siguientes entradas hablaremos de las casas astrales, o los escenarios donde, o la vida nos pasa, o donde, al contrario, nos podemos apropiar y encontrarle el propósito a nuestra existencia. Para saber qué es una casa, lea aquí.

Todos conocemos nuestro signo solar. Los que nacieron a comienzos de enero saben que son capricornio, comenzando junio, que son cáncer… pero muy pocos saben de un signo que es igual, o en ocasiones, más importante que nuestro propio signo de nacimiento.

Es el signo llamado “ascendente”, que tiene que ver con la casa 1 de nuestra carta astral. Este se obtiene de la hora exacta y lugar de nuestro nacimiento. Por eso, en culturas antiguas, decían que era casi más importante tener en el parto a un astrólogo que a un médico… los niños terminan naciendo, es la naturaleza de la vida. Mientras tanto, el astrólogo estaba pendiente de su primera respiración, del primer contacto con el mundo “real”, para pintar el mapa astral que marcaría el inicio de su destino.

La casa 1 por lo tanto, al ser el comienzo de nuestra existencia en el mundo material, nos habla de lo que somos: nuestro yo (ego), nuestro cuerpo, nuestra personalidad y por lo tanto, de cómo nos mostramos y nos perciben los demás.

Para entenderlo sencillamente, hagamos una analogía con un carro y un conductor, donde el carro sería el ascendente o la casa 1, y el conductor nuestro signo solar, lo que realmente somos. No es lo mismo entonces, ser un viejito con artritis y cataratas intentando manejar un fórmula 1, que tener un carro familiar y que quien lo maneje tenga, en efecto, 5 hijos y 2 perros… como tampoco es lo mismo ser una elegantísima mujer estrato 20 manejando un viejo jeep del 80 que se pincha a cada rato, que ser un trabajador del campo que manejan un tractor agrícola.

Es por eso que muchas veces nos sentimos manejando el “carro equivocado”, y por lo mismo, un poco perdidos, extraños, contradictorios, creyendo ser de tal o cual manera mientras los demás nos perciben de otro modo… la lucha entre nuestro ego material y nuestro yo espiritual, nuestro signo solar.

Al ser una parte tan importante de nuestra carta, marca cosas que no puedo dejar pasar por alto, pues realmente son curiosas. Veamos algunos ejemplos de lo que pasa con ciertos signos o planetas en la casa 1.

Con Acuario o Urano: puede dar nacimientos imprevistos, o que se adelantan. Personas excéntricas y bien particulares físicamente.

Con Aries o Marte, la persona puede terminar con una cicatriz en la cabeza o cara, pues Aries rige la cabeza.

Con Sagitario o Júpiter, Cáncer o la luna, puede existir tendencia a la gordura o a los excesos.

Con Capricornio o Saturno, la persona puede tender a ser flaca, muy seria, miedosa o en extremo rígida y responsable.

Libra o Venus puede dar una persona excepcionalmente guapa.

Estos son tan solo algunos datos que reflejan la importancia de conocer y entender a profundidad nuestro signo ascendente… en pocas palabras es el vehículo que tenemos para transitar el camino de la vida, y si no sabemos cómo cuidarlo o cómo manejarlo, jodidos… aún no tenemos la capacidad de comprar uno nuevo para reemplazarlo.

Sebastián Aguirre

Carta Astral

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